En España, las enfermedades inmunomediadas afectan a más de 2,5 millones de personas. Estas patologías representan un reto para la comunidad científica y clínica. En primer lugar, por su carácter de inmunodeficiencia y, en segundo lugar, por su carácter autoinmunitario. Este escenario de inseguridad e incertidumbre se conjugó en marzo de 2020 con la crisis provocada por el virus SARS-Cov-2.
Con el objetivo de conocer los cambios y el alcance que la pandemia de la COVID-19 está suponiendo en la vida de las personas con enfermedades inmunomediadas, la Fundación Instituto Inmunes promueve la encuesta “¿Cómo está afectando la pandemia por la infección de COVID-19 a las personas con patologías inmunomediadas?”. Esta completa encuesta está conformada por diferentes preguntas sobre aquellos aspectos que puede interferir en la mejora de la calidad de vida de este colectivo.
Para obtener una muestra considerable de pacientes, la Fundación pide colaboración a todas aquellas personas que están diagnosticadas de alguna IMID. Estas accederán a un cuestionario completamente confidencial que consta de tres partes donde se analizarán diferentes datos.
¿Cómo nos ha afectado la Covid-19 a quienes tenemos una enfermedad inmunomediada?
Los nuevos fármacos para las enfermedades inmunomediadas prometen actuar sobre el órgano afectado desde los inicios de la enfermedad. Esto supondría reducir el daño evitando secuelas de la inflamación y atacando otros síntomas como la fatiga, rigidez matutina o problemas musculares y neuropáticos que tanto afectan a la calidad de vida de estas personas. Pero este futuro de oportunidad no puede limitarse solo a su parte clínica.
El acceso al tratamiento sanitario y conocimiento de hábitos saludables, un correcto afrontamiento psicológico de la nueva situación y un entorno que no estigmatice al individuo con este tipo de patologías, puede ayudar a su completa integración en la sociedad. También los pacientes pueden poner por su parte. El estudio, a través de talleres y encuestas como la que nos ocupa, pueden poner de manifiesto las necesidades cubiertas y no cubiertas y en las que habrá que incidir. Y es que, esta encuesta no solo sirve para conocer el estado de las personas con patologías autoinmunes frente a la COVID-19. También permitirá acercarse a sus carencias y, desde ellas, valorar el impacto de grandes pandemias como la actual.